09 abril 2016

Sí.

Es como un "vete pero recuérdame". CONSTANTE. No era capaz de salir de aquella situación por más que se empeñara en ello. A veces se sentía muerta en vida, pero sólo cuando no recordaba que vivir era maravilloso. Miraba a un lado y a otro y veía reflejos del sol en todas partes. Había salida. En ocasiones saber decir adiós es madurar, querer seguir, decir sí.

No hay comentarios: